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¿ Quién frena los asaltados y muertes por escopolamina en Montañita?
Los asaltos y robos a turistas con escopolamina se incrementan más los fines de semanas en la Comuna Montañita de la parroquia Manglaralto en la provincia de Santa Elena. La poca presencia policial facilita a estos delincuentes operar con facilidad para atrapar a sus víctimas, en su mayoría jóvenes que llegan de diferentes provincias a disfrutar una noche de descontrol en ese balneario.
La víctima mortal de este fin de semana por presunción de escopolamina, fue el joven portovejense, Cristhian Vera de 21 años. Fue encontrado desorientado y golpeado en una de las calles de Montañita en horas de la madrugada del domingo 22 de agosto del 2021, al llegar los paramédicos lo trasladaron al Hospital de Manglaralto.
Según los medios de comunicación de Santa Elena, después de dos horas de su ingreso dejó de existir. Y los médicos de la casa de salud diagnosticaron una fuerte dosis de escopolamina. Aunque el resultado de la autopsia realizada en la morgue de Santa Elena, reveló muerte por paro cardíaco, esto no convence a los familiares.
Los robos con escopolamina
“ Un fin de semana en el mes de abril de este año, emprendimos un viaje a Montañita junto a cuatros amigos desde Manta. Al llegar al hotel nos registramos, dejamos nuestras pertenencias y salíamos a recorrer el pueblo para comprar algo de artesanías”, recordó Katiusca, una agraciada dama de 22 años.
La mujer recordó que al regresar al hotel por la noche, se encontraron con la ingrata sorpresa, sus mochilas revueltas y algunas de sus pertenencias fueron sustraídas. En el establecimiento nadie respondió y para denunciar estos actos delincuenciales tenían que viajar hasta Santa Elena y no lo hicieron.
“ Nos cambiamos de hotel y por suerte nadie dejó dinero en las mochilas. Fue una experiencia muy mala porque después vino lo peor”, recordó Katiusca.
Cerca de la medianoche de ese mismo día cuando se encontraban en un bar, según recordó la joven junto a Marlon otro de los muchachos que también viajó aquel fin de semana. Apareció una pareja de extranjeros que tenían acentos colombianos y venezolanos ofreciéndoles artesanías.
“ Katiusca y dos amigos se levantaron de la mesa porque decidimos volver al hotel ante la experiencia que tuvimos. La pareja que “vendía artesanías”, eran un hombre y una mujer. Yo decidí ir al baño del bar y hasta allá me siguió la chica, era venezolana, me insistía que le comprara algo, de un momento a otro perdí el conocimiento”, recordó Marlon.
Los amigos de Marlon recordaron que al darse cuenta que no salía decidieron entrar al baño. “ Encontramos a Marlon desorientado, casi desmayado, el dueño del bar señalaba que estaba ebrio y él no había tomado. Marlon no consume alcohol y sus pertenencias no las tenía; inmediatamente llamamos al ECU - 911 porque empezó a convulsionar, actuamos a tiempo y eso le salvó la vida” dijo en su relato Juan Diego, otro de los viajeros.
Marlon,fue llevado a una casa de salud particular de Santa Elena, los médicos le realizaron lavado de estómago y desintoxicación. Le diagnosticaron intoxicación con escopolamina. Su recuperación duró varias semanas.
“ Decidimos nunca más visitar Montañita, no hay autoridad que garantice tu seguridad en ese balneario. Existen muchos extranjeros (venezolanos y colombianos) que se dedican a robar con escopolamina eso nos aseguraron”, recordó Katiusca.
Muertes misteriosas con sospecha de escopolamina
En enero del 2021, un joven oriundo de Loja visitó por primera vez la comuna Montañita junto a dos amigos. Después de una noche de farra sus acompañantes decidieron regresar al hotel. Según información dada en su momento por los involucrados.
El Lojano decidió seguir bebiendo con unos extranjeros ( venezolanos) que conoció aquella madrugada y desapareció misteriosamente. A los cuatro días de búsqueda su cuerpo fue hallado flotando frente a Montañita. El caso nunca fue investigado.
El sábado 17 de abril del 2021, el cuerpo de Carlos Reyes Triviño de 26 años, fue encontrado sin vida en un acantilado de 300 metros de altura. Era de Guayaquil y sus acompañantes ese mismo día fueron llevados de urgencia a un hospital. Estaban escopolaminados y estos narraron lo ocurrido sin saber en ese momento de la muerte de su amigo.
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